miércoles, 8 de noviembre de 2017
Campo.
-Cinco pétalos tiene
la flor que él ama:
la camisa de lino,
el refajo de lana
el vestido de seda,
el delantal, la capa-.
Aquel árbol de la cumbre
tiene las bridas del viento;
la capa de su jinete
pinta de celeste al cielo
y el agua del río se aleja
acariciando reflejos.
El pastor trenza su honda
con fibras de esparto nuevo,
mientras el rebaño va
dejando desnudo el suelo.
Ella en el barranco rojo
sus ramas rubias dio al viento.
Las miradas del pastor
oblicuamente crecieron.
Ella en el barranco rojo
y él en el perfil del cerro.
Manuel Altolaguirre.
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