viernes, 30 de junio de 2017

No son recuerdos.



El tiempo es una llanura
y mi memoria un caballo.

Jinete suyo, yo voy
a oscuras por ese campo
sin detenerme en recuerdos
fugaces como relámpagos.

Mi caminar por el tiempo
tan sólo tiene un descanso
en el año de tu muerte
-isla de luto y de llanto-.

Plaza de mármoles fríos
y luna yerta. Me paro
deteniendo mi memoria
desbocada con espanto.

Junto al ciprés de tu sueño
para verte descabalgo.

No son recuerdos, que es vida
y verdadero el diálogo
que contigo tengo, madre,
cuando aquí nos encontramos.


Manuel Altolaguirre.

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