martes, 7 de junio de 2016

Bahía.


 
A Luis Corona
 
Las semanas emergen
del fondo de los mares
y las algas decoran los bares
 
Para que tú te alejes y yo pueda cantar
esperaremos el regreso
del viento de artificio y de la pleamar
 
Por eso
y con un ruido que no es el de otras veces
en la bahía ha anclado
tu melena enmohecida
violín para los peces
y para los suicidas
 
Venid a ver las nubes familiares
en mi taller todas las tardes
Son los naipes del cielo que nadie ha marchitado
 
El humo de la fábrica
hizo su nido en mi tejado
para los fumadores
que en la cartera llevan
un muestrario completo de habituales colores
 
Y mientras yo modelo mi retrato columna
sobre los montes delicados
pisa desnuda la lluvia
 
En las manos me deja
su corona de espinas
y cantando se aleja
sobre los techos y los climas
 
Tu cabellera gime sin poder levar anclas
 
Embárcame contigo
timonel de las galernas
Que el enjambre goloso de tus lluvias
se me pose en el hombro y en la pierna.
 

El viejo y el Sol. Había vivido mucho. Se apoyaba allí, viejo, en un tronco, en un gruesísimo tronco, muchas tardes cuando el sol caía. Yo p...