viernes, 5 de octubre de 2018

Pinares.


No se ven hombres.
No hay causa de interrupción inoportuna.
Se entrega a una luz que es pausa
la copa del pino en luna de verano - castellano-.
¿Luego?
Creedme: temprano la vida,
que va a empezar
a mover su brega bronca,
vale más si un ansia entronca
la paz actual del pinar.

Jorge Guillén.

El viejo y el Sol. Había vivido mucho. Se apoyaba allí, viejo, en un tronco, en un gruesísimo tronco, muchas tardes cuando el sol caía. Yo p...