miércoles, 21 de diciembre de 2016

Quietud.



No, si no se acaba hoy
esto que tengo empezado,
ya lo sé... Sí hay que dejarlo.
Tú, alfabeto; tú intención;
Tú, papel blanco, !qué inútiles
esta noche que otra perfección
me entrega, infecunda virgen alta,
de cristal, antigua, inmóvil!
Me llama un ocio, un quehacer
de no hacer nada, de estarse
como agua pura, ni río,
ola ni torrente, agua
quieta esperando que pasen
por arriba alas o nubes,
las almas que tengo fuera.
Un ocio tan hondo que yo ya sé
que lo que tengo empezado
se cumple en el no acabar,
su sinfín tiene perfecto,
no se ve, ya de tan claro.

Pedro Salinas.

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