viernes, 2 de octubre de 2015

Ventana.







El violín descorre la cortina

Pende de un clavo la ventana

Aún está clausurado el paisaje

El sol         balón de oxígeno
mantiene puro el cuadro
y la lluvia hace el barnizaje

Esta casa está viva
Dos veces por minuto
la ventana respira

Y de mis manos surge
esta humareda votiva

En la pared el cuadro muere todos los años

Yo soy el pianista otoñal

Yo abro y cierro la noche como un libro
e interpreto la música
de mi cielo manual

Podéis elegir
la hora y la puerta

Pero después de amar hay que morir

El viento deja de nuevo en blanco mi cuaderno

Otra vez a empezar

No busquéis en el techo el planeta paterno.


Gerardo Diego.

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