viernes, 13 de diciembre de 2013

Como aquella nube blanca.



Ayer estaba mi amor 
como aquella nube blanca 
que va tan sola en el cielo 
y tan alta, 
como aquella 
que ahora pasa 
junto a la luna 
de plata.

Nube 
blanca, 
que vas tan sola en el cielo 
y tan alta, 
junto a la luna 
de plata, 
vendrás a parar 
mañana, 
igual que mi amor, 
en agua, 
en agua del mar 
amarga.

Mi amor tiene el ritornelo 
del agua, que, sin cesar, 
en nubes sube hasta el cielo 
y en lluvia baja hasta el mar.

El agua, aquel ritornelo, 
de mi amor, que, sin cesar, 
en sueños sube hasta el cielo 
y en llanto baja hasta el mar.

León Felipe.

El viejo y el Sol. Había vivido mucho. Se apoyaba allí, viejo, en un tronco, en un gruesísimo tronco, muchas tardes cuando el sol caía. Yo p...