martes, 23 de enero de 2018

Los senderos.



Se interrumpe el verdor en las orillas
de los senderos, lisa tierra muda,
sin verdes voces para nuestros ojos.
Su silenciosa lengua gris
nos pide peregrinar, seguir,
dejar a un lado tan hermosos lugares de reposo:
jardines donde estar toda la vida;
jardines amarrados por caminos
que oprimen con sus fuertes ligaduras
el cuerpo vegetal que, desatado,
sin entradas posibles, sin salidas,
perpetua paz,
eterno edén nos diera.


Manuel Altolaguirre.

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